Había una cosa que sabía a ciencia cierta, los Sabia en el fondo del estomago y en el tuétano de los huesos, lo sabia de la cabeza a los pies, lo sabía en la hondura de mi pecho vació ... El amor concede a los demás el poder para destruirte
martes, 2 de agosto de 2011
El tiempo pasa, incluso aunque parezca imposible, incluso a pesar de que cada movimiento de las manecillas del reloj duela como el latido de la sangre al palpitar detrás de un cardenal. El tiempo transcurre de forma desigual, con saltos extraños y treguas insoportables, pero pasar, pasa .. Incluso para mí
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